El PSEUDO-CARLISMO americano: una nueva UTOPÍA

 


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6 comentarios sobre “El PSEUDO-CARLISMO americano: una nueva UTOPÍA

  • el agosto 9, 2023 a las 12:22 pm
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    Que yo sepa la denominación de «Españas» viene de la historia y una realidad política:

    Cuando la PENÍNSULA IBÉRICA (Hispania para los romanos ), que no «España», que era un reino visigodo con población germánica e hispanorromana, es invadido por los musulmanes y en algún momento comienza la reacción contra el invasor, la reconquista, empieza como es natural en las partes más alejadas, que además son muy montañosas.

    La razón de su rebelión es preservar la fe católica y recuperar el antiguo reino visigodo invadido.

    Pero esos puntos de rebelión en el norte, al hacerse fuertes e ir bajando hacia el sur, van creando una realidad propia, realidad que tiene su legitimidad formal del reino visigodo.

    Así se forman 5 realidades políticas (los «5 reinos»): Castilla, Aragón, León, Portugal y Navarra.
    Estos reinos tienen instituciones diferentes y con el tiempo idiomas diferentes, aunque sus reyes se casan entre sí, por ello acaban unificándose.

    Los primeros que utilizan la palabra «España» son los provenzales (esto es típico), el Estado independiente del sur de Francia vecino a la península. Los siguientes son los italianos cuando los aragoneses hicieron su expansión internacional, porque para ellos eso era «España».

    Con el tiempo, como el Estado más importante era Castilla, en los demás paises europeos llamaban España a Castilla; y rey de España al rey de Castilla.

    Hasta el siglo XVIII con los Borbones (y Portugal ya independiente un siglo antes) cada Estado tenía sus parlamentos, sus leyes, su moneda propia, sus pesos y medidas propios (lo mismo pasaba en toda Europa) con una población dividida en estamentos (nobleza, burguesía y clero). Alemania estaba dividida en 300 o 400 Estados, con varias ciudades-Estado. Esto cambiará con la revolución en Francia y las invasiones napoleónicas en el resto de Europa (y naturalmente con el ascenso económico de la burguesía, que acaba haciéndose con el poder político y lo intentará con el religioso )

    Resulta que el lugar del mundo occidental más unificado y moderno son…las Indias españolas.
    Más incluso que las 13 Repúblicas origen de EEUU.

    Pues bien, en las monedas acuñadas tanto por los Austrias (incluidos Milán, Nápoles, Sicilia, Flandes) y los Borbones (el derecho a acuñar moneda es uno de los símbolos o marcas de soberanía, según Bodino) dicen en latín claramente: «Rex Hispaniarum» y no «Rex Hispaniae», incluidas las de Fernando VII de Borbón y las del rey invasor José, hermano de Napoleón.

    (en concreto «HISPANIARUM · ET · IND · REX «, porque son realidades unidas, pero diferentes)

  • el agosto 9, 2023 a las 1:15 pm
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    Referente al carlismo americano con D. Sixto, hay que decir que esto es una cosa muy moderna, seguramente con este señor, que encabezará una tendencia conservadora-católica.

    Hay que decir que esto es natural (biológicamente estamos más vinculados a personas que a ideas abstractas). Seguimos líderes, personas; y como vemos en ciertos paises, como los partidos políticos en la India, o instituciones, como las sectas judías jasídicas, parece ser algo biológico. Lo que no es normal son los paises republicanos, especialmente los grandes, por lo que hay que mantener artificialmente la ficción constantemente (y aun así el Presidente hace de rey temporal)

    Volviendo a los argumentos legales, que parecen fascinantes, y a la historia, que es la que es, hay que recordar que los paises son hijos del tiempo, especialmente cuando han pasado 200 años y cada uno tiene personalidad propia. Hay que tener cuidado con esto de «monarquías», porque precisamente una de las fuerzas separatistas fueron las republicanas; es decir, hacer en América, sirviendo los mismos intereses y con la misma palabrería, la revolución francesa y, en concreto, en España, para privar al Rey Fernando tras recuperar sus poderes «absolutos» de la plata americana (el liberal español general Francisco Xavier Mina va a México a separarlo con ese fin)

    La verdad es que todo esto es ridículo.

    En el antiguo régimen, la función del Rey, además de ser cabeza de su Pueblo, era la de la defensa y la justicia. El resto de actividades lo hacía la Iglesia o particulares. Y en esto, el imperio español fue un éxito, porque cuantos más paises, más recursos para la defensa unificada pueden aportar. Y la «ideología» católica aseguraba la justicia, dentro de los limites humanos. Es más, murió de éxito, porque se convierte en el blanco de todos, especialmente de los protestantes («todos contra España»). De hecho lo que sella la separación de Portugal fue la pérdida de las Molucas (las Islas de las Especias o «Especiaría»), colonia propia y fuente de su riqueza.

    En los paises modernos, las necesidades son muy otras, especialmente en los paises donde hay un Estado del bienestar. Que además pagan muchos más impuestos y por tanto exigen del Estado otros servicios.

    En concreto la burguesía exige protección para los productos que fabrica (es decir, que sólo son liberales para lo que le interesa ), de ahí que busque crear un mercado nacional protegido con aranceles y ayudas (tiene entonces sentido que en México y otros lugares quieran un rey propio, Felipe VII u otro Infante que éste elija, pero propio)

    La ideología que protege la nación es el nacionalismo, que es una manipulación a través de los sentimientos (y aquí está lo grave; doblemente porque sirve intereses privados con nombres y apellidos y porque no rige la razón. En su caso extremo es anticatólico, porque para lograr sus fines utiliza elementos prohibidos por la doctrina, como el racismo). El problema es que los paises son demasiado grandes como para no tener que recurrir a estas manipulaciones que mantengan unida la nación y su mercado.

    Argentina es una república y como república debe funcionar, según los principios católicos (y no «multiculturales»), porque desde la colonización así se ha formado esa sociedad. Eso es lo que ha hecho a los argentinos como son, lo quieran o no.

    Tal vez el futuro de Argentina sea unirse a Chile y Brasil ¡quién sabe!…o incluso ser una monarquía Sixtina (cosas más raras se han visto), pero ahora el problema no es ese, sino la inflación, el paro, el marxismo cultural, el nihilismo y el hedonismo consumista, la destrucción de la cultura occidental…

  • el agosto 9, 2023 a las 3:15 pm
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    Una aclaración sobre la «Ley Sálica» (es un resumen personal; en Wikipedia está mucho más desarrollado)

    Esto es una fantasía que aparece en Francia en el s. XIV por la cual las mujeres (y por tanto sus hijos) no pueden heredar el reino. Los salios se supone que fue un antiguo pueblo germánico.

    Esto sirve para que el pais no sea gobernado por un príncipe extranjero, aunque tenga mejor derecho. Se prefiere una rama menor, pero del pais.

    Gracias a esto Francisco I fue rey de Francia.

    Cuando el nieto de Luis XIV de Francia, Felipe de Borbón (i.e. «francés») de España gana la guerra de sucesión (Felipe V) da un decreto (una pragmática sanción, creo) por la cual establece la Ley Sálica en España. (no exactamente; se conoce como «Reglamento de Sucesión»)

    Esto es totalmente ajeno al derecho político español, porque en todos los reinos la mujer puede heredar el reino; la única diferencia está en Navarra, donde la mujer hereda, pero gobierna su marido asistido de un consejo.

    Cuando va a morir Fernando VII, que sólo tiene una hija, deroga la Ley Sálica (manda publicar la derogación que hizo su padre) y con ello deshereda de facto a su hermano D. Carlos.

    Pero lo que se puede poner por una Ley, se puede derogar por otra. Por tanto ni D. Carlos ni sus herederos han tenido ningún derecho dinástico a partir de ese momento.

    Lo que sucedió es que entonces España estaba dividida entre «liberales» y «tradicionalistas» y, por su posición conservadora y muy católica, el Infante D. Carlos se convierte en el líder natural de esa facción, muy importante, que encabeza con el título de «rey», aunque legalmente no tiene derecho.
    (nótese que las mismas tensiones existen en América, aunque no haya reyes)

    Alfonso Carlos de Borbón, que es el último descendiente directo de esta rama, muere sin descendencia. Aquí se acaba esta dinastía y por tanto D. Sixto no tiene ningún derecho.

    Es más, el heredero natural de Alfonso Carlos, a través de su antepasado común, el Infante Francisco de Paula (hermano pequeño de D. Carlos) es el rey D. Alfonso XIII (sucesor directo de la hija de Fernando VII)

    La única razón de los reyes es dar una estabilidad a través de la herencia (de ahí que las monedas digan que son reyes «Dei Gratia»). Si no hay herencia, no hay derecho.

    Lo que sucede es que en esa época el carlismo/tradicionalismo tenía todavía mucha fuerza y una parte de este movimiento elige como sucesor a un sobrino por parte de su mujer (es decir, sin ningún derecho ): son los Borbón-Parma (duques que gobiernan Parma, Plasencia y Guastalla desde la secesión del Imperio español). Pero esto es otra familia.

    Aun así es más complicado, porque el hijo es Carlos Hugo de Borbón-Parma es socialdemócrata («socialismo autogestionado») (lo contrario al tradicionalismo). Muere dejando 2 hijos varones.

    Sixto es el hermano menor de Carlos Hugo.

    Esta gente no tiene ninguna legitimidad que no sea la de ser duques de Parma; y en Parma está enterrado Carlos Hugo, en la basílica de Santa María de la Steccata, panteón de los Farnesio y los Borbón-Parma. Esa basílica es también la sede de la Sagrada Orden Militar Constantiniana de San Jorge, rama parmesana, la orden dinástica de esa familia.

    El tradicionalismo parece que ha desaparecido o está muy debilitado en España y parece que ha derivado en nacionalismos regionales a-católicos. (otro peligro de fiarse de estas ideologías )

  • el agosto 9, 2023 a las 8:11 pm
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    Excelente Padre, muy bien dicho y razonado. Mis calurosas felicitaciones.

  • el agosto 9, 2023 a las 8:23 pm
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    Es interesante pensar por un momento el fenómeno «necarlista» desde una perspectiva psicológica. A mi parecer, es una reacción contra el malestar general causado en la Nación por los (malos) gobiernos republicanos, con la sola excepción de Juan Manuel de Rosas y el brevísimo interregno de Juan Carlos Onganía, que abrió un canal modesto, pero abierto, sí, de esperanza política, tempranamente abortado por la torpeza militar y las insidias de Perón, que se veía desplazado del centro escénico de la política argentina, que pensaba recuperar en plenitud gracias a Aramburu.
    Por lo tanto, ante tamaño fracaso de la vida política no solamente argentina sino probablemente ibero americana -ya se sabe que lo que pasa en la Argentina repercute en seguida en toda América- y en especial la imposibilidad del nacionalismo católico, tradicionalista por esencia, de hacer zarpar esta portentosa nave hacia los rumbos que las certezas íntimas han creído merecer con toda justicia, algunos «tradicionalistas» han vuelto su mirada hacia el no poco interesado mundillo «carlista», fracasado en España completamente y con inexplicables saltos dinásticos de difícil o imposible explicación, como un refugio supuestamente creíble a sus aspiraciones.
    Por lo tanto, su causa moral probablemente sea la decepción.

  • el agosto 10, 2023 a las 2:43 pm
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    Don Javier, con el respeto que se merece, permítame decirle que no debería ironizar con la partícula “neo”. Tirar piedras al vecino cuando se tiene techo de vidrio no es muy ingenioso. En nuestros tiempos abundan los que pretenden armonizar lo nuevo con lo antiguo, la predicación de la Verdad con el silencio cómplice, la Tradición con la defensa del Novus Ordo, etc., etc., engendrando toda clase de “neomonstruos” y haciendo, para justificarse, malabarismos intelectuales que erizarían al mismo Lutero.

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