Una objeción muy común es citar el canon 3 del Concilio de Constantinopla IV, 870 DC (reconocido solo por la Iglesia Católica Romana) para hacernos ver como idólatras.

También se basan en falacias de espantapájaros afirmando que los Teólogos Católicos afirman que se usó la palabra «adorar» porque no existían palabras alternativas. Irónicamente no se citan fuentes y si lo hiciesen aquí se demostrará lo errores de dichos apologistas.

Refuerzan sus argumentos por medio de una exégesis la cual es válida pero tendenciosa para acusarnos dichas prácticas, porque no contemplan la evolución del lenguaje que se mostrará a continuación.

Podemos citar como ejemplo la palabra griega «martyr», la cual Bíblicamente significa «testigo» sin necesidad de que la persona esté muerta como hoy en día lo entendemos. Hechos 1:22 nos muestra dicha evolución:

«comenzando desde el bautismo de Juan hasta el día en que de entre nosotros fue recibido arriba, uno sea hecho TESTIGO con nosotros, de su resurrección.»

«ἀρξάμενος ἀπὸ τοῦ βαπτίσματος Ἰωάννου, ἕως τῆς ἡμέρας ἧς ἀνελήφθη ἀφ’ ἡμῶν, ΜΑΡΤΥΡΑ τῆς ἀναστάσεως αὐτοῦ γενέσθαι σὺν ἡμῖν ἕνα τούτων.»

¿Acaso Matias, Barsabás y los Apóstoles padecieron la muerte a causa de la Fe en Cristo?

Obvio que no. Por lo cual la exégesis Bíblica y la comparación con el canon 3 del Concilio de Constantinopla IV no pasa de un sofisma.

Por otro lado la exégesis tendenciosa se basa en el postulado soloescriturista, por el cual se pretende que el Dogma se limite solamente a la exégesis obviando los cambios producidos en el idioma a lo largo de casi nueve siglos. Como bien sabemos la Escritura es una regla de Fe pero no es la única. Los Dogmas son Revelaciones Divinas no limitadas a un mero método, sino en conjunto con la Tradición por medio del Magisterio la Iglesia reconoce y determina lo que se ha de creer.

Además la COMPRENSIÓN de las Verdades es gradual en la historia de la Iglesia. Se puede citar como ejemplo a la Trinidad:

¿Acaso los padres apostólicos no eran subordinacionistas (explicaban el concepto Económico de la Trinidad de manera erronea) hasta que se empezaron a hacer sínodos regionales en Cartago (252, 262,265,269 DC) y ya de ser una explicacion erronea paso a la categoria de herejia? Dejo algunos ejemplos:

Atenágoras (120 – 160 DC) en «Deprecatio Pro Christianis» IX – X, escribió que el «Espíritu Santo» es una emanación de Dios que procede de Él y regresa a Él como los rayos del sol.

Tertuliano (215 DC) en Apologeticum XXI considera al Logos de Dios (Sermo o Verbum) como Dios en sentido derivado, por ser de la misma sustancia de Dios; Dios que viene de Dios como luz que proviene del sol. Y en Adversus Hermogenem III tampoco considera al Hijo coeterno con el Padre. El Hijo de Dios no siempre existió, sólo a partir de ser engendrado por el Padre.

Si no aceptan la evolución Teológica de los Dogmas que se hagan subordinacionistas.

Para de abordar este tema es bueno profundizar la evolución del lenguaje y los idiomas que fueron redactados los cánones para poder discernir la Verdad.

A- Vayamos primeramente al idioma griego y comparemos los Textos Bíblicos con la patrística para ver tal evolución:

Mateo 4:10 (60 DC),

τότε λέγει αὐτῷ ὁ Ἰησοῦς· Ὕπαγε ὀπίσω μου, σατανᾶ· γέγραπται γάρ, Κύριον τὸν Θεόν σου προσκυνήσεις καὶ αὐτῷ μόνῳ λατρεύσεις.

«Entonces Jesús le dijo: Vete, Satanás, porque escrito está: Al Señor tu Dios adorarás, y a Él sólo servirás.»

Apología de Justino Mártir (150 DC):

«A Él y al Hijo, que de Él vino y nos enseñó todo esto, y al ejército de los otros ángeles buenos que le siguen y le son semejantes, y al Espíritu profético, le damos culto (sebometha) y adoramos (proskuneó), honrándolos (timontes) con razón y verdad, enseñando sin reserva, a quien quiera saberlo, lo mismo que nosotros hemos aprendido.» (Apología I, 6, 2)

Vemos como San Justino menciona en su primera apología el culto a los ángeles, el usa la palabra «adoramos» pero no debemos entender sus palabras en sentido de una adoración como la que se da a Dios, sino mas bien un «homenaje» (Veneración)

En este texto de San Justino vemos cómo usa la palabra «adoramos» referenciada a las ángeles, sin embargo ningún apologista protestante dirá que San Justino esta aprobando la idolatría a los ángeles. Sino que aqui mas bien se refiere a «venerar» el texto realmente quiere decir «le damos culto y veneramos». Debemos entender que «venerar» y «adorar» tienen el mismo significado pues «proskyneo» en griego se aplica al mismo tiempo para «ADORAR» que para «VENERAR», por lo que para saber a qué se refiere el texto, tenemos que atender el CONTEXTO. Y dicho contexto (de «proskyneo») lo marca el complemento como se verá más adelante.

B- Ahora vayamos al latín y comparemos con la Vulgata de Jerónimo (siglo V DC) los pasajes en discusión:

Mateo 4:10,

tunc dicit ei Iesus vade Satanas scriptum est Dominum Deum tuum ADORABIS et illi soli servies

Hechos 5:34,

surgens autem quidam in concilio Pharisaeus nomine Gamalihel legis doctor HONORABILIS universae plebi iussit foras ad breve homines fieri

Hebreos 12:9,

deinde patres quidem carnis nostrae habuimus eruditores et REVEREBAMUR non multo magis obtemperabimus Patri spirituum et vivemus

Observación: como podemos ver aquí mientras en el griego de mediados de siglo II se usa «proskyneo» como sinónimo de «culto» que no es de adoración, el latín del siglo V DC mantiene tal distinción.

C-Ahora vayamos con el canon III del Concilio de Constantinopla IV (870 DC):

653 337 Can. 3. Sacram imaginem Domini nostri Jesu Christi et omnium Liberatris et Salvatoris, aequo HONORE cum libro sanctirum Evangeliorum ADORARI decernimus.

654 337 Sicut enim per syllabarum eloquia, quae in libro feruntur, salutem consequemur omnes, ita per colorum imaginariam operationem et sapientes et idiotae cuncti ex eo, quod in promptu est, perfruuntur utilitate; quae enim in syllabis sermo, haec et scriptura, quae in coloribus est, praedicat et commendat; et dignum est, ut secundum congruentiam rationis et antiquissimam traditionem propter HONOREM, quia ad principalia ipsa referentur, etaim derivative iconae HONRENTUR et ADORENTUR aeque ut sanctirum sacer Evangeliorum liber atque typus pretiosae crucis.

655 337 Si quis ergo non ADORAT iconam Salvatoris Christi, non videat formam ejus, quando veniet in gloria paterna glorificari et glorificare sanctos suos (cf Thess2 1.10); sed alienus sit a communione ipsius et claritate;

656 337 similiter autem et imaginem intemerate matris ejus et Dei genitricis Mariae; insuper et iconas sanctorum Angelorum depingimus, quemadmodum eos figurat verbis divina Scriptura; sed et laudabilissimorum Apostolorum, Prophetarum, martyrum et sanctorum virorum, simul et omnium Sanctorum, et HONORAMUS et ADORAMUS. ( ) Et qui sic se non habent, anathema sint a Patre et Filio et Spiritu Sancto.

Ahora veamos las traducciones desde la versión griega:

D-337 [Versión del texto griego:] Can. 3. Decretamos que la sagrada imagen de nuestro Señor Jesucristo sea ADORADA CON HONOR (proskynesin theskysomen) igual al del libro de los
Santos Evangelios. Porque a la manera que por las sílabas que en él se ponen, alcanzan todos la salvación; así, por la operación de los colores trabajados en la imagen, sabios e ignorantes, todos gozarán del provecho de lo que está delante; porque lo mismo que el lenguaje en las sílabas, eso anuncia y recomienda la pintura en los colores. Si alguno, pues, no adora la imagen de Cristo Salvador, no vea su forma en su segundo advenimiento. Asimismo HONRAMOS Y ADORAMOS (proskynesis TIMI) también la imagen de la Inmaculada Madre Suya, y las imágenes de los santos ángeles, tal como en sus oráculos nos los caracteriza la Escritura, además las de todos los Santos. Los que así no sientan, sean anatema.

Observación: La palabra «adorar» en griego es «proskynesis», pero en este caso viene acompañado de la palabra «timi» que es «temer», por lo cual la «adoración» (o culto) dado a las imágenes no son de «latría».

También existe la palabra «honore» que es «honor». Por lo cual las diferencias entre «adorar» y «honrar» siguen en pie.

D- El problema del argumento protestante es no discernir que los criterios de veneración de íconos proviene del Concilio de Nicea 787 DC, el cual en su traducción al latín dice:

600 302 (definitio) … Regiae quasi continuati semitae, sequentesque divinitus inspiratum sanctorum Patrum nostrorum magisterium, et catholicae traditionem Ecclesiae (nam Spiritus Sancti hanc esse novimus, qui nimirum in ipsa inhabitat), definimus in omni certitudine ac diligentia, sicut figuram pretiosae ac vivificae crucis, ita VENERABILES ac sanctas imagines proponendas tam quae de coloribus et tessellis, quam quae ex alia materia congruenter in sanctis Dei ecclesiis, et sacris vasis et vestibus, et in parietibus ac tabulis, domibus et viis: tam videlicet imaginem Domini Dei et Salvatoris nostri Jesu Christi, quam intemeratae Dominae nostrae sanctae Dei genitricis, honrobiliumque Angelorum, et omnium Sanctorum simul et almorum virorum.

601 302 Quanto enim frequentius per imaginalem formationem videntur, tanto, qui has contemplantur, alacrius eriguntur ad primitivorum earum memoriam et desiderium, ad osculum et ad honorariam his ADORATIONEM TRIBUENDAM, NON TAMEN AD VERAM LETRIAM, quae secundum fidem est quaeque solam divinam naturam decet, impartiendam: ita ut istis, sicuti figurae pretiosae ac vivificae crucis, et sanctis evangeliis, et reliquis sacris monumentis, incensorum et luminum oblatio ad harum honorem efficiendum exhibeatur, quemadmodum et antiquis piae consuetudinis erat. Imaginis enim honor ad primitivum transit: et qui ADORAT imaginem, ADORAT in ea depicti subsistentiam.

Traducción al español:

D-302 [I. Definición.] …Entrando, como si dijéramos, por el camino real, siguiendo la enseñanza divinamente inspirada de nuestros Santos Padres, y la tradición de la Iglesia Católica – pues reconocemos que ella pertenece al Espíritu Santo, que en ella habita –, definimos con toda exactitud y cuidado que de modo semejante a la imagen de la preciosa y vivificante cruz han de exponerse las sagradas y santas imágenes, tanto las pintadas como las de mosaico y de otra materia conveniente, en las santas iglesias de Dios, en los sagrados vasos y ornamentos, en las paredes y cuadros, en las casas y caminos, las de nuestro Señor y Dios y Salvador Jesucristo, de la Inmaculada Señora nuestra la santa Madre de Dios, de los preciosos ángeles y de todos los varones santos y venerables. Porque cuanto con más frecuencia son contemplados por medio de su representación en la imagen, tanto más se mueven los que éstas miran al recuerdo y deseo de los originales y a tributarles el saludo y ADORACIÓN DE HONOR, NO CIERTAMENTE LATRÍA VERDADERA que según nuestra fe sólo conviene a la naturaleza divina; sino que como se hace con la figura de la preciosa y vivificante cruz, con los evangelios y con los demás objetos sagrados de culto, se las honre con la ofrenda de incienso y de luces, como fué piadosa costumbre de los antiguos. «Porque el honor/timi de la imagen, se dirige al original» (2), y el que adora/timi una imagen, adora/timi a la persona en ella representada.(…)

Observación: dicho Concilio Niceno en total comunión con la Iglesia Ortodoxa fijó los parámetros para el debido honor a los íconos. Y en este caso por estar en común acuerdo en lo que respecta con la Iglesia Ortodoxa cuyo lengua es la griega, podemos tomar como intercambiables dichas palabras («adorat» y «timi») y su significado en materia de culto («proskynesin») no específicamente de «Latría».

Cuando se tradujeron los cánones al latín se homogeneizó el tipo de lenguaje por lo cual en este juego de neologismos se tomó la palabra «adorar» como correlativa a «proskyneo» sinónimo de «culto» y se crearon subcategorías para los mismos en base a su Jerarquía:

Culto de Latría (LETRIAM)/Proskyneo exclusivo para Dios.

Culto de honor/Timios (no «Latría» verdadera) para los íconos.

E- Volviendo al Concilio de Constantinopla IV se expanden las categorías instituyendo el culto de «hiperdulia» para la virgen y «dulia» para los santos y ángeles.

Para ello el lenguaje otra vez cambia, «timeo» cambia a «dulia» (término comúnmente usado en el contexto de servidumbre doméstica pasa a tener una connotación Sacra). Y «proskyneo» que es «culto» pasa a ser sinónimo de «adoración» pero su complemento («Latreia», «hiperdulia» o «dulia») determinará que tipo de culto nos referimos.

Por lo cual concluimos que más allá de las variaciones semánticas, el culto o adoración de los íconos no es idolatría.

Ya que para Dios se le reserva el máximo grado («Latreia») y la exclusividad. Aparte que como señala San Juan Damasceno, no se adora la materia sino lo representado.